Durante el mes de mayo visitamos Paraguay y sus ciudades principales. Un recorrido rápido por la provincia de Misiones en Argentina nos llevó al sur del país para ingresar entonces a la Ciudad de Encarnación, mas no sería esa nuestra primera parada.
Fue el pequeño Pueblo de San Cosme y Damián el primer objetivo del sur del Paraguay. Allí se encuentra el único planetario de su tipo y pudiera decirse que el más importante, no sólo por el objetivo que como miembro de la International Planetarium Society destaca en visitar planetarios, sino porque allí encontramos uno de los primeras referencias de la astronomía de Suramérica.
El Centro Astronómico Buenaventura Suarez debe su nombre a quien alrededor de 1718 fuera el primer astrónomo de Paraguay. Este misionero jesuita nacido en Argentina, recorrió estas tierras cruzando el río Paraná donde se estableció y lideró la construcción de las Ruinas Jesuíticas que hoy en día se mantienen y sirven para las actividades frecuentes de la religión católica. Buenaventura conoció de los Guaraníes que habitaban la zona su cosmovisión, la cual aún se mantiene y en conjunto aprovecharon de utilizar para el estudio de la agricultura, registro y predicción incluso, de las fases de la luna y eclipses.
Buenaventura Suarez construyó el 1er telescopio artesanal y tal vez del Paraguay, según los registros fue realizado con un tubo de Bambú y cristales de Cuarzo pulidos y a partir del mismo se realizó el llamado LUNARIO DE UN SIGLO, escrito de Buenaventura donde posiciona y cataloga muchos de los cuerpos celestes que sirvieron incluso para que Paraguay obtuviera su independencia casi un siglo después aprovechándose de las fases de la Luna.
Es gracias a esto y mucho más que incluso en la plaza principal de San Cosme y Damián se erige una estatua en su honor mostrando aquel telescopio del cual hizo uso. En la Misión se encuentra un reloj solar que data de la época de Buenaventura y que acompaña a las ruinas de los Santos Cosme y Damián, que dan el nombre a este hermoso pueblo.
Por su parte el Planetario de San Cosme y Damián o Centro de Interpretación Astronómica, es un pequeño complejo observatorio que dispone de 2 telescopios de gran precisión y techo corredizo.
La calidad de los cielos es realmente alta ya que al ser un pequeño pueblo no cuenta con grandes edificios pudiendo aprovecharse en gran parte la observación de estrellas. El predio alrededor del planetario cuenta con un tobogán en forma de galaxia, recurso que se usa para explicar sobre estos objetos, así como un gnomon de 2 metros aproximadamente donde se pueden realizar mediciones de solsticios y equinoccios y distancias de las sombras.
La sala de proyección audiovisual, introduce a Buenaventura Suarez y la Astronomía Guaraní antes de pasar al Planetario, en estas se describe algunas estrellas y constelaciones, así como el significado y relación de las mismas con la cultura y tradiciones Guaraníes así como la importancia de estas en la actualidad ya una vez en el planetario, se resaltan con la proyección de estrellas la visión de los Guaraníes y la posición de las constelaciones en relación a las estrellas mencionadas.
Durante nuestra estadía realizamos actividades interactivas con los niños de la comunidad que respondieron a la convocatoria. Desde observación solar con telescopios hasta lanzamiento de cohetes y demás tareas que Mochileros Astronómicos suele preparar y realizar con quienes nos acompañan, motivando a la creatividad para realizar sus cohetes y mostrando durante la noche la calidad de los cielos, estrellas y constelaciones al igual que durante la formación realizada durante las charlas y conferencias de astronomía. Todos ellos recibieron un certificado de participación y estamos seguros que seguirán participando de las actividades que el personal del planetario podrá realizar para ellos.
Agradecemos a SENATUR y al personal que en el planetario labora, pues a pesar de la alta burocracia y excesos de requisitos solicitados logramos asistir al lugar, agradeciendo el hospedaje y la alimentación otorgados, pero mucho más especialmente el cariño y apoyo recibido, las sonrisas y momentos que compartimos para los que no existen trámites sino voluntad.
Este es un lugar altamente recomendado y donde existe un gran potencial ya que es el primer planetario visitado cuya historia y objetivos nacen a partir de una misión religiosa.
ENCARNACIÓN
En la ciudad de Encarnación, el grupo de Astronomía PERSEIDAS DEL SUR nos recibió con sus jóvenes representantes, Paz Groos y Robert, Así como Natasha, Alejandra y otros. Jóvenes entusiastas interesados por las ciencias del espacio y quienes organizaron las logísticas para entregarnos una agenda muy exigente durante la semana que allí estuvimos.
El primer lugar que visitamos se encontraba en el Colegio Técnico con chicos de Secundaria con quienes realizamos una conferencia de astronomía y física básica y allí conocimos a Jazmín, también representante del grupo y que organizó todas las logísticas necesarias para aprender de esta ciencia y fan de la galaxia del Sombrero. Realizamos el ya acostumbrado movimiento parabólico para explicar las propiedades de este movimiento a través de un lanzamiento de cohetes y para el día siguiente, nos fuimos a la comunidad de Cambyretá donde compartimos en dos colegios rurales las actividades básicas de este proyecto en relación a los planetas y demostraciones interactivas. La alegría de visitar Cambyretá se evidenció en las sonrisas y curiosidad que los pequeños de esta zona alejada de Encarnación nos mostraron al participar de nuestras experiencias.
No fue sino hasta el 3er día de actividades en Encarnación, que Paz nuestra anfitriona y estudiante de derecho, quien además hace voluntariado en un centro penitenciario para menores, nos invita a este lugar a realizar demostraciones de astronomía a jóvenes privados de libertad de entre 14 y 17 años aproximadamente. Es la primera vez que ingresamos a estas instituciones y la experiencia además estuvo cargada de grandes emociones.
Cabe mencionar que la recepción de los chicos fue muy amena, acostumbrados a ver a Paz semanalmente con quienes siempre realizan actividades, nos saludaron con mucho entusiasmo y curiosidad. Nos preguntaban de dónde éramos y qué hacíamos y miraban esperando saber qué teníamos preparados para ellos.
Con alrededor de 20 chicos les mostramos primeramente el Sol a través de las gafas solares, cautivados por la forma del mismo comenzaron a realizar preguntas sobre las estrellas, mismas que respondí con mucha facilidad para luego pasar al tema de los planetas.
Una rápida explicación sobre los objetos de nuestro sistema solar fue realizadap para luego hacer una escala del sistema solar en la cancha deportiva. Una vez hecha la escala, comenzamos a hablar del tamaño del universo y a través de los globos, invitamos a conocer las diferentes teorías de expansión espacio-tiempo.
Un momento de ansiedad se creó en la parte final de esta experiencia, los chicos,una vez inflados los globos, tenían que soltarlos y correr detrás de estos a buscarlos. Paz, Pablo y yo, quedamos expectantes sin saber si los chicos se animarían a esto, pero al hacer el conteo y soltar los globos, una energía entre los jóvenes despertó y estos sonrientes y animados corrieron tras estos y demostraron la emoción con la que buscaban recuperarlos como respuesta a lo enseñado apenas minutos antes con la demostración.
Esto en nosotros despertó una alegría y motivó a seguir compartiendo con ellos, el momento de lanzar cohetes comenzó para aprovechar de conocer sobre el movimiento parabólico y ellos en todo momento continuaron siendo protagonistas de las actividades que se desarrollaban. Comenzamos a explicar el procedimiento para lanzar cohetes y qué tan lejos estos podían llegar y en todo momento con su energía y sonrisas trataban de hacer volar cada uno de ellos cada vez más alto y más lejos, así como sus sueños ya que estar en ese lugar, fue como estar en otro colegio, con adolescentes como otros con metas, con sueños y que con nuestra visita encaminamos esperamos haber encaminado o canalizado los mismos para el momento en el que sean reinsertados en la sociedad.
Al finalizar esta experiencia, la carga de emociones que teníamos se evidenció en el momento de salir del precinto. Tanto los chicos como nosotros nos conectamos a la realidad. Éramos todos niños inocentes viajando por el universo y caímos en una realidad llamada vida.
PILAR
A través del grupo Perseidas del Sur y sus redes sociales logramos contactarnos con el grupo de astronomía de la ciudad de Pilar, AstroPilar.
Este grupo que con apenas 3 meses de creado, se interesó por conformar en esta parte del occidente paraguayo actividades diversas de astronomía, fue entonces que con muy poco tiempo Lucas Cuyuá, logró preparar un encuentro de ciencias en la Universidad (UNISAL) así como en 3 colegios para la mañana del día posterior a nuestra llegada y fue así como a pesar del poco tiempo, logramos cumplir con esa agenda. No conocimos mucho de la ciudad pero nos queda pendiente para una futura ocasión, puesto que a pesar del poco tiempo que allí estuvimos, las personas que conocimos en los colegios se conectaron con nosotros e invitaron a muchas actividades que con gusto regresaremos a cumplirles.
Una ruta llena de magia e historia.
Nuestro último destino en Paraguay llegó de forma repentina, muy similar a Pilar. La representante del grupo Artesane de las colonias unidad de Hohenau, a 40 minutos en auto de la ciudad de Encarnación, conoce de nosotros y encuentra la forma de contactarnos para invitarnos, pero antes pasamos por Capitán Miranda. Allí conocimos a Robert Godefroid, integrante de Perseidas del Sur y descendiente de un reconocido radioastrónomo de la zona con el mismo nombre. Robert Godefroid de nacionalidad Belga llegó a Paraguay hacia los años 50, allí construyó el primer observatorio astronómico de la zona de tipo solar y además desarrolló proyectos de construcción de radio emisoras pues su pasión por estos medios lo llevó también a incursionar en la radioastronomía. Con estos equipos logró realizar observaciones de diversos elementos en la bóveda celeste así como catálogos de estrellas.
Todo su trabajo y elementos de estudio están muy bien conservados por su familia y tuvimos la oportunidad de conocer el valor que estos representan para la historia de la astronomía del departamento de Itapúa y Paraguay como tal.
Luego de conocer este importante lugar, también recibimos una invitación en la siguiente parada, Trinidad, allí nos llevaron a las ruinas Jesuíticas de ese lugar donde disfrutamos de un hermoso atardecer y de las construcciones que muestran un gran esfuerzo y obras impactantes con más de 200 años de antigüedad.
HONENAU
Las Colonias Unidas de Hohenau, es una comunidad de descendientes europeos asentados en este lugar, su nombre es la traducción de Pradera Alta en Alemán, y allí fuimos invitados por Lutgard, representante del proyecto Artesane, donde con Ricardo su esposo nos recibieron y agendaron para nuestro último día en Paraguay un conjunto de actividades a realizar con padres e hijos del sector en el Parque de las Naciones.
Previamente una entrevista fue realizada para convocar a los habitantes quienes no dudaron en participar en conjunto con sus hijos en la serie de dinámicas que preparamos para un Domingo familiar.
Desde la comunidad Belga llegaron todos los habitantes de Hohenau a compartir con nosotros. Primeramente conociendo lo extenso del Sistema Solar en el largo predio. Corriendo o saltando de planeta en planeta, divirtiéndonos con cada detalle curioso que descubríamos en los planetas pero también conociendo el universo a través del lanzamiento de globos.
Mezclando diversos componentes, entre los que destacan la imaginación y la diversión, recreamos la superficie de un planeta para explicar cómo se forman los cráteres de impacto meteórico, varios minutos de paciencia fueron aceptados a cambio de realizar entre todos una lluvia de asteroides para aprender entonces, cómo es que la luna tiene todos esos hoyitos en su superficie.
Por último, padres, madres, hijos e hijas, participaron juntos en el lanzamiento de cohetes. Acompañando desde el conteo regresivo, hasta el despegue de los mismos en una breve competencia que terminó con premios de risas, aprendizaje y momentos únicos en familia.
Al caer la tarde, todos volvimos a juntarnos, un breve descanso antes de una breve explicación del nacimiento de las estrellas para todos y finalizar con una demostración de Lightpainting, donde desde los más pequeños hasta los más grandes aprovecharon su creatividad para pintar con luz.
El sur de Paraguay nos ofreció una última semana de grandes emociones. Ir desde la ciudad más grande a atravesar el país de Este a Oeste, visitar lugares inimaginados en esta ruta y conocer personas de todas partes y condiciones sociales diferentes, nos hizo saber que somos diferentes e iguales al mismo tiempo, pues las emociones y energías son las mismas. Gracias a la astronomía y a las maravillas del universo todos estamos conectados formando parte de un cosmos que no tiene fronteras, barreras físicas o mentales. Que nuestro universo puede compartirse a través de una sonrisa, un abrazo y que la ciencia tiene una magia especial.
